Dia de pago.

después de unas cuantas semanas trabajadas, me voi al puerto a gastarme la plata como se debe: pescado con papas fritas a las doce i media y putas después de las siete.
(luego de un par de copas todo comienza a olvidarse)

hacer cuando no haces.

ahora que la suerte está echada, tengo todas las ganas de irma a playancha, donde no ma llamo marietta, sino francisca. Correr después de almuerzo detrás del heladero i comerme una paleta doble de chocolate de los helados york. Tomar once con pan batido con tomate i bajar a pata al plan. Tomar terremoto, o sino una chela a luca. O un vinito con frutilla.
Leer la estrella. Hablar con el abuelito de al lado para que me de un alca. Aunque no me gusten los alcas porque pican.
Bajar a la playa a tirarse al sol mientras escuchas loco loco de amor, loco loco por ti de la radio de una señora que le da huevos duros a los niñitos.
Quiero dormir hasta la una i media.
Quiero leer cualquier weá i demorarme dos semanas si quiero. o tres. o todas las vacaciones.
o no leer.

felices vacaciones para mí.
(L)

el frío y la lluvia producen monstruos.

El día en que dejaste de quererme hacía un frío de esos en que se te congelan las patas. El cerro tenía nieve hasta bien abajo, así que el quiebre fue como una película gringa, de esas bien romanticonas que dan los domingos en la tarde.
Esa mañana no vi el tiempo, se me olvidó ponerme las botas de lluvia, así que el agua me llegó hasta las rodillas, no como tú, que andabas bien abrigadito y con muchas ganas de sacarme los cuatro años que estuvimos juntos en cara. Entendí completamente la letra de una canción de los prisioneros que mi papá tarareaba cuando era chica. Mientras me hablabas de cosas que no entendía trataba de sacar mis guantes del bolsillo, pero no pude. Tu excesiva frialdad, tal vez teniendo un poco que ver con el clima, me dejó perpleja.
Quizás por eso fue mi apuro en tu bien preparado discurso. Mi ¿terminaste? No fue sarcasmo, fue necesidad. La lluvia se ponía cada vez más fuerte.
Para pasar la pena me fui corriendo al carrito de la esquina a comprarme una sopaipilla. Ahí me encontré con el Alfredo, un perro que hallé en una situación tan parecida a la mía, todo mojado, triste y muerto de frío, que no pude evitar llevármelo. Por el día y el contexto le puse tu nombre y, cada vez que llueve y sale al patio a jugar me acuerdo de ti. De como se te ocurrió dejarme un día tan frío y lluvioso como ese y cómo a mi no se me ocurrió ponerme las botas.

Quien mató a Gaete

Cuando hace calor, ¿en que es lo primero que piensas?
(quiero un vino con duraznos, melón con vino, una cerveza helá, etc.)
Cuando tienes frío, ¿en que piensas?
(quiero un navegao, un vinito tinto con maní, etc)
Cuando te paten, ¿en que piensas?
(me lo voi a tomar todo porque ahora mi vida es una mierda)
Cuando te va bien, ¿en que piensas?
(entonces, celebremos)
Cuando se te muere alguien, ¿en que piensas?
(nonononono, si es una copita, pa la pena)


Toda la razón tenía Redolés.-

a la gente no le gustan los consejos, ¿para que insiste?

M odiaba los fines de semana porque no podía fumar tranquila. Todos las veces que A la veía fumar se ponía histérica: la gente que toma pastillas no fuma. Lo que A no sabía era que las pastillas ya no importaban. Que después que tienes una hermana de quince con guagua, los anticonceptivos no funcionan.
Cuando M se acuerda de ese dia, fuma. Cuando ve películas en las que nacen guaguas, fuma. Cuando ve a la gente morir de cáncer, fuma.
Lo malo es que A nunca se va a dar cuenta.
Asi que M seguirá fumando y A seguirá creyendo que le hacen caso.

En chile la izquierda atemoriza a la gente.

tomó un manual de excel y se aprendió todos los trucos que pudo.
practicó dos semanas por si se le iba algo.
preparó un speach de 15 minutos por si le tocaba un jefe vaca.
puso el despertador viente minutos antes por si no pasaba la micro.
planchó dos veces la camisa (en la noche i en la mañana)
tomó un buen desayuno.
se lavó los dientes hasta con enjuague bucal.
llegó.
su jefe lo vio sacar su curriculum con la mano izquierda.
¿es zurdo?, lo siento. No podemos aceptarlo.

ando super yoyó

para escribir hai que tener pena.
yo soi un poco depresiva, como casi todos los santiaguinos, me ahogo.
cuando me ahogo fumo.
voi despacito i saco el libro de teillier que me regaló el max hace como tres años para un cumpleaños. leo el poema más tristes. el de las llaves.
bajo i me fumo otro cigarro.
escucho algún disco de radiohead.
bajo i fumo de nuevo.
me acuesto i espero a que se me quite.
a veces saco una copita de vino, de los que guarda mi papá.
a veces se me quita.
otras no.

así son los locos.
eso dice mi mamá al menos.

http://www.youtube.com/watch?v=qqsyXdj_p_I

chaito nomás.

Estaba harta de hacer cosas por tí. Eso de dar hasta que duela nunca ha sido lo mio. Asi que me aburrí. Decidí no ser ni Andrea, ni Julia, ni Constanza ni Juana. Ni siquiera fui yo. Si no te gusta te vas.
i te fuiste.
no cerraste ni la puerta.

:)

hoi dia me pasaron tres cosas buenas:

- mi papá llegó con las dos entradas para el concierto de ana gabriel
-me grabaron conan el niño del futuro completa
-me fue bien en semántica

me gusta. no me gusta

no me gusta escribir con i griegas. también escribo las palabras en inglés como me suenan, porque me complican las comitas de entremedio. las guaguas las escribo wawas i me siguen gustando las watitas con salsa. me da asco el manjar i todas las tortas del mundo. tampoco la leche condensada-me carga que se quede el azúcar en la garganta. me gusta el arroz. arroz con tomate, con palta, con pollo, etc. me carga la gente. mucha gente en poco espacio. me carga que hablen de las wawas. mi hijo esto, mi hijo aquello. puaj. me cargan las comas, pero amo los puntos seguidos. me gustan los párrafos justificados i la letra taims. me gusta ir a valparaiso i sentir el viento por la ventana de la casa de mi tia. amo que lo cigarros me duren un segundo por el vendaval que se forma a las seis de la tarde. me gusta bailar. en las fondas. en las casas. en todos lados. canto i hablo sola. me carga lavarme el pelo i que haga calor. me gusta leer cosas tristes i escuchar canciones triste cuando tengo pena. me gusta el vino i la chicha. el terremoto. el ron con cocacola. me dan asco las bebidas sin color. me gustan los niñitos flaquitos i las niñas con chasquilla. mencantan las series gringas. me gusta que la fernanda me diga que me echó de menos mientras no estuve. que el francisco me abrace bien fuerte cuando me ve. que el mac me diga que me echa de menos i que la cata me diga que me quiere. me gustan los rulos de la marcela i que me quiera todo el tiempo.me importa un bledo que syrgo me diga que está maoma no más. odio a mi abuelo hasta el infinito. mencantan las empanadas. con ají i caldúas. me gustan los viernes con sol i viento. me gustan los vestidos i las chalas. me cargan los pitos, pero amo los queques. me gusta que la tia edi me rece. (tengo en la billetera un sagrado corazón que me dió la última vez que la fui a ver). amo que mi mamá sea loca, que viva en otro mundo. que se quede pegá con la tele i se duerma con las películas malas. que mi papá sea watón. que nos quiera a nosotros más que al mundo. me gusta cantar disco 2000 cuando estoi contenta.
me gusta más que nada estar contenta.

you do it again

desde hace cinco años esperaba a que te murieras. Planiè tu muerte màs veces que la mia. me ganaste por 15 tipos. mercurio, cortes, alcohol, pastillas, cuerdas, etc. pero no, tenias que irte de una forma tan patetica como la vida que llevabas. te dije que me cargaban los gatos, por lo mismo recogiste al primero que encontraste. Ni te imaginabas que iba a ser el mismo el que se te enredaria entre las piernas. El mismo que te botaria por las escaleras. El mismo que te partiria la cabeza. me cagaste la vida 234 veces. i te moriste. i me dejaste las deudas del funeral. 235 veces fueron en total.

Fortunas familiares.

A los ingleses le gustaban los jardines. jardines con hartas flores i poca marihuana. jardines con muchas nanas gorditas i pañuelos en la cabeza para el sol. el sol me pone contenta. a los ingleses también. here comes the sun, duru duru, here comes the sun, i say, it´s all right. las casas tienen que ser bien grandes i con todos juntos. todos juntos como los jaivas. el que quiere pieza separá tiene que ser papá o mamá. los dos sirven. sigue estando de moda que el water esté afuera, pero la caquita de caballo se va lejos. muchas nanas. el con más nanas gana. si te casas con la nana te vas al cielo, tu mamá también del puro ataque.
nimporta
al final, todos los perritos se van al cielo.
dats ol.

(lo que aprendí de Leonore Davidoff y Catherine Hall)

De como se matan dos pájaros de un tiro

Ese día me dijiste que tenías que quedarte a trabajar, como casi todos los jueves desde hace ya más de un mes. Yo, como todas esas semanas te creí. Es que esos ojos claros y ese chaleco que usas bien apretadito no me dejaban pensar lo contrario. Lo malo para mí (y en parte para ti) fue que ese jueves yo tenía una despedida. Mi mejor amigo (ese que odiaste hasta el último día) se iba a Alemania por dos años. Ahí estabas tú. En un rincón con esa (según tu mismo describías) fea, chica y sin talento tomando nuestro vino.
Cuando te vi se me cayó la cara de espanto. No todos los días te das cuenta de algo que todos creen imposible. Así que ahí quedé- sola como un dedo y sin pan ni pedazo- por culpa de una fea y chica que resultó ser muy linda y alta que terminó quedándose contigo y de paso con mi dignidad.

no todo es lo que parece

salió mui bien. seis centimetros de quiste en un ovario. le juro que no le quemé nada. mañana puede comer de todo. el lunes vuelve a caminar. tómese estas pastillitas i ni va a sentir los tirones. ya viene la enfermera a quitarle el suero. nos vemos el jueves para el control. (gracias por pagar en efectivo)(no sabía que la pieza individual era más cara?) (dejó el cheque de garantía?) (esto no lo cubre el auge)(la consulta del jueves no viene incluida en el precio).

Hastaquí nomás llegamos.

Quedan 4 horas para que sea mañana.
Más de cien hojas por leer.
Un mínimo de quince hojas por escribir.
Y más de la mitad de un cerebro carbonizado.

Chile olvida.

Cuando decidiste dejarme en los juegos que hay en la plaza Brasil no tenías 15, tenías 20. Cuando me mandaste un mensaje para decirme que ya no me querías tenías 21, no 17. Cuando decidí no volver a aguantarte tenía 22, no 18. Por eso cuando te encontré comprando sopaipillas en el Terminal, seguro para ir a ver a tu mamá al puerto, me dieron ganas de anotártelo todo, para que entendieras porqué te mandé a la mierda en mi cumpleaños número 23.

pucha.

hai veces en que te mueres de ganas de escribir algo pero se te olvidan las palabras.
asinomás.

no name.

asi somos
asi estamos

a diez años de distancia

tu pensando en tu pasado y yo contemplándolo
haciendo y no haciendo
hacer como que hacemos
hablando y no diciendo
asi están las cosas.

calentándote con palabras que no existen

such, remember, whathever

estar-siempre-a-punto-de

siempre es mejor fumarse algo
y mandar todo a la mierda.

la sangre tira.

hai dias en que el odio puede jugar una mala pasada. hai llamados que pueden jugar una mala pasada. como ese dia en que llamó mi abuelo. ese viejo de mierda que nos veo desde hace más de dos años. el que es capaz de olvidar tu nombre, tu cumpleaños, tu casa, tu existencia. pero no tu numero. desgraciadamente el celular tiene mente propia i tiende a jugar con tu tiempo libre. cuando vas en la micro, aburrido en un taco i empiezas a apretar botones. esos momentos lo llevaron a llamar en plenas vacaciones. todos quedaron helados ante la cara embobada de mi papá. era como un niño de cinco años que siente que es la persona más importante del mundo i que no podria ser mas feliz. aunque sea mentira. hasta yo sentí que podria quererlo de nuevo. que dos llamados más i estaria convencida de que me quiere. que no me encuentra ridicula i loca.tonta. fea i un sin fin de defectos.cortó. todos rieron cuando empezó a llover. torrencialmente. en rapel. en febrero. en nuestras vacaciones.

la gente es rara y hace cosas raras.
llamar, por ejemplo.

La carencia.

Yo no sé de pájaros,
no conozco la historia del fuego.
Pero creo que mi soledad debería tener alas.

[Pizarnik, Alejandra.]

Era común verlo tirado en una escala de Los Héroes. Sus pies llenos de heridas causaban asco en unos, pena en otros. Más común aún era el pan con jamón que se compraba en la tarde, luego de recolectar algunas monedas. Lo comía con cuidado, con los años se le habían caído los dientes. Lo más triste fue el día en que se lo llevaron a punta de lumasos. Ser vago es contra la ley. Hoy lo reemplaza un ciego. Ya no hay respeto por los viejos en Santiago…